La gran movilización social ha sido la respuesta pública al insólito fallo del tribunal tucumano que absolvió a los procesados por la desaparición de Marita Verón.
La fuerte condena social significa total y absoluto repudio a la complicidad policial, jurídica, política y económica con el uso de personas como objetos que se venden y compran como cosas.
Repudiamos la trata de personas por ser una de las peores formas de degradación y desvalorización humana que lleva, como en este caso, a la desaparición de personas.
Acompañamos y respaldamos a Susana Trimarco que en el año 2008 recibió el premio dignidad de nuestro organismo de derechos humanos, la reconocemos como un ejemplo de lucha contra la corrupción que la trata de personas implica. Su lucha la compara con otras mujeres en nuestro país que han luchado y luchan por la verdad, justicia y dignidad humana.
Afirmamos nuestra esperanza en que la condena social al fallo, que ha movilizado gran parte del país, produzca cambios que abran nuevos caminos de lucha para desterrar definitivamente este corrupto negocio.
Mesa Directiva de la APDH
Buenos Aires, 17 de diciembre de 2012