Desde la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, acompañamos y nos solidarizamos con los y las docentes que conmemoran el brutal crimen del maestro Carlos Fuentealba, asesinado el 4 de abril del 2007 durante una marcha por el pedido de respeto a los derechos laborales de los docentes de Neuquén.
Fuentealba fue asesinado por la espalda por un policía del grupo de élite Despo de la policía provincial durante una represión salvaje que buscaba impedir un corte de ruta legítimo de los docentes.
Carlos Fuentealba fue herido gravemente con una granada de gas lacrimógeno cuando docentes se estaban retirando en caravana.
Acompañamos el dolor de sus familiares y compañeros/as y como siempre apoyamos la lucha docente que continúa reclamando por sueldos dignos y condiciones de trabajo apropiadas.
¡Carlos Fuentealba! ¡Presente!