Santiago de Chile, Sede CEPAL/CELADE, 19 y 20 de Abril de 2007
A cinco años de la aprobación del Plan de Acción Internacional de Madrid sobre Envejecimiento, los países de América Latina y El Caribe se realizó la primera reunión de "examen y evaluación" de los compromisos asumidos por los Gobiernos de la Región y Entidades relacionadas con el tema.
Desde Naciones Unidas se recomienda que la evaluación debe "hacer frente a los desafíos y las oportunidades del Envejecimiento", que "incluya, junto con un debate plenario, una serie de mesas redondas y actos paralelos relacionados con el tema", e invitando a los Gobiernos a que estos procesos se hagan "utilizando el criterio de abajo hacia arriba" y esté presente "la sociedad civil, participando en los exámenes y evaluaciones y a contribuir a las diversas actividades y actos".
Para dar cumplimiento a esta evaluación la Comisión Económica para América Latina y El Caribe, CEPAL, junto al Centro Latinoamericano y Caribeño de Demografía, CELADE, en coordinación con los organismos del Grupo Interinstitucional sobre Envejecimiento organizan para el 2007 una Conferencia Regional Intergubernamental. De la misma forma, se resuelve que se "desarrolle actividades conjuntas con las redes de la sociedad civil, para la prestación de apoyo a los países en el seguimiento y evaluación del Plan Internacional de Madrid sobre Envejecimiento y de la Estrategia Regional para la Implementación del Plan de Acción para América Latina y El Caribe del Plan Internacional de Madrid".
Durante el desarrollo del Seminario en el que estuvieron presentes 10 Países Latinoamericanos y del Caribe, tanto la Lic. Nora Pochtar como el Dr. Santiago Pszemiarower, representando a Organizaciones de la Sociedad Civil de Argentina (Asociación Cristiana de Jóvenes, YMCA; Asociación Abuelas de Plaza de Mayo y Asamblea Permanente por los Derechos Humanos APDH, respectivamente), tuvieron una participación activa, sobre todo en lo relacionado con la construcción del Foro de ONG´s, que tendrá lugar en Brasilia los días 2 y 3 de Diciembre de 2007.
En el 1er. Panel "Implementación de las Políticas y orientaciones para la Seguridad Económica y la Generación de Ingresos para Adultos Mayores en la Región", visión de la realidad desde el Plan Mundial y Regional; junto al Dr. José Miguel Guzman, CEPAL-CELADE Punto Focal de Envejecimiento, Sr. Jacobo Velasco, Oficial de Análisis e Información Laboral OIT; y la Sra. Inés Denegri, UCAM La Cisterna, Chile CEC/FOSIS, el Dr. Santiago Pszemiarower leyó la siguiente Ponencia:
Título: Experiencias laborales de Adultos Mayores en el marco del Desarrollo Social desde la mirada de los Derechos Humanos
Autores Dr. Santiago N. Pszemiarower, Médico Geriatra
Autores Lic. Nora Pochtar, Psicóloga
Asamblea Permanente por los Derechos Humanos APDH-Argentina
Todas las Recomendaciones del Plan de Acción de Madrid, enfatizan permanentemente sobre la necesidad de visibilización del creciente grupo etáreo de Adultos Mayores, reconociendo en los miembros de este colectivo sus aptitudes y capacidades y esperando de las organizaciones gubernamentales, no gubernamentales y de la Sociedad en su conjunto, ese reconocimiento. Es en esa línea que la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos presenta esta Ponencia, relacionada con experiencias innovadoras en torno a la actividad laboral de Mayores, que incluyan a su vez el fortalecimiento de los vínculos Intergeneracionales.
Rescatamos, las que mencionan:
"Los gobiernos y la sociedad civil deben reconocer la capacidad de las personas mayores para contribuir al desarrollo social. Dicho reconocimiento ha de basarse en el respeto a la diversidad cultural, étnica y de experiencias de vida de las mujeres y hombres mayores".
"Los gobiernos y la sociedad civil deben propiciar el aprovechamiento del recurso social que suponen las personas mayores, para el desarrollo de sus países, en tareas de solidaridad intergeneracional y con otras personas mayores, preservando siempre su dignidad".
Las proyecciones demográficas se están cumpliendo, esas Adultas y Adultos Mayores ya integran la sociedad, sin embargo habremos de insistir pues las representaciones sociales negativas operan en contra de la verdadera inclusión social de los Mayores, impidiendo en la mayoría de los casos la valoración de sus experiencias y su plena participación.
En las últimas tres décadas, casi todos los países de América Latina han sufrido dramáticas transformaciones en sus estructuras económicas y sociales. La gran mayoría de ellos han estado sometidos a profundos procesos de reforma política, dirigidos a la reducción del gasto público y social y a la redefinición de las modalidades de intervención del Estado en materia económica, social y educativa. De esta manera, muchos de los Estados de la región han transformado su papel de garantes y promotores de los derechos sociales, entre ellos el derecho al trabajo, en un rol meramente subsidiario atravesado por las lógicas del mercado.
Recorriendo un poco la historia reciente de Argentina y varios Países de la Región; mientras que el Estado mantuvo su rol activo de protector del trabajo y de los Derechos de él derivados, así como de proveedor de atención de la situación social de aquellos sectores expulsados del mundo del trabajo, la Seguridad Social se desarrolló con mayor o menor éxito según la riqueza de las naciones, pero sin dudas sobre su utilidad o grado de eficiencia.
Aparece aquí el cuestionamiento de los sistemas tradicionales de la Seguridad Social, criticándose los regímenes de reparto como provocadores de las crisis económicas de los Estados, considerándose negativa la facilidad para obtener beneficios, desprestigiando las conquistas laborales como las culpables del retroceso social, etc. Al asumir el mercado el rol de regulador absoluto de todas las situaciones humanas, ejerce una violación de los Derechos de los trabajadores y de los beneficiarios de los sistemas de Seguridad Social.
Así lo entendimos quienes redactamos y fuimos signatarios de la Declaración de Santiago (Junio-2003), cuando:
CONSTATAMOS:
Que, en nuestros países sufrimos crisis nacionales y regionales como consecuencia del modelo de desarrollo que, impulsado por agencias multilaterales y aplicado bajo políticas nacionales condicionadas por el sistema financiero y comercio internacional, poco han aportado a la construcción de Estados libres y democráticos que llenen las aspiraciones de sus ciudadanos para gozar de una mejor calidad de vida, de justicia y equidad social y defensa de sus legítimos derechos. Este modelo de desarrollo ha profundizado las desigualdades, la inequidad en la distribución de ingresos, anteponiendo la idea de lucro y ganancia en el centro de las relaciones sociales, en franco detrimento de amplios sectores de las sociedades que viven en pobreza y miseria.
Afortunadamente (y cuando aun falta mucho por hacer), en Argentina se están tomando decisiones que intentan revertir situaciones de tanta inequidad, como por ejemplo el "Programa de Inclusión de Jubilaciones" (ANSES) que abrió las puertas para que puedan jubilarse aquellas personas que cumplen con la edad de retiro (60 años para las mujeres y 65 para los varones) pero no cuentan con los años de aportes que marca la Ley. Ya se inscribieron para cobrar el beneficio alrededor de 1.000.000 de personas, también aquellos hombres y mujeres que tenían aportes pero que no alcanzaban a los 30 años, pagando una moratoria durante 5 años, pueden jubilarse. El sistema fue ideado para contrarrestar los efectos de casi dos décadas de elevadísimos niveles de empleo irregular sin aportes previsionales.
También la Sociedad Civil se ha movilizado para dar respuestas que se están plasmando en numerosos emprendimientos, dos de los cuales compartiremos con Ustedes, por ser novedosos y creativos, al fin y al cabo quienes hoy transitan una larga vida han pasado la mayoría de sus años dedicados al trabajo y han sido circunstancias como las señaladas ajenas a su voluntad, las que les impidieran seguir haciéndolo.
Para la OIT si bien hay trabajadores de edad que tienen que seguir trabajando a causa de su precaria situación económica, es bastante frecuente que otros jubilados emprendan una actividad económica totalmente distinta, comiencen otra carrera o se dediquen a algún tipo de negocio por cuenta propia. A su vez para la OMS una característica esencial de los trabajadores de más edad es la de que tienen experiencia, que les permite compensar los otros déficit de la edad; en tanto que la capacidad disminuye con la edad, la experiencia aumenta y la suma de estos dos factores, determina la capacidad del trabajador.
Muy brevemente presentaremos la "Cooperativa de Trabajo Maderera Córdoba", uno de los tantos emprendimientos laborales que en Argentina, han surgido desde los años 2001-2002.
Maderera Córdoba S.A. llevaba medio siglo, especializada en la fabricación de molduras antiguas y muebles con un nivel de calidad que en algunos rubros no tenía competencia. Al fallecer el fundador se hicieron cargo su esposa e hija; la Empresa comenzó a decaer como efecto de una mala administración, pero sobre todo por la crisis generalizada del País y la competencia de algunos hipermercados. En 2001 entró en convocatoria y de modo cada vez más precario, siguió trabajando hasta diciembre de 2003, en el que el Juez dictó la quiebra y ordenó la clausura. Desde el local vecino donde funcionaban las oficinas, un grupo de mujeres y hombres Mayores, siguieron trabajando con limitaciones. El 1º de Julio de 2004, constituidos en Cooperativa consiguieron la Ley de expropiación temporaria por la propiedad y las máquinas, recuperando poco a poco la antigua clientela. Producen dos veces y media más que cuando empezaron, pero todavía están en un 50% del ideal. Recibieron subsidios del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para poner en condiciones la maquinaria y reabrir el Salón de Ventas.
El predio total de la Maderera es de 2.500 metros cuadrados, lo cual permite que el proyecto crezca más allá de lo comercial. Arriba de las oficinas funciona un Colegio Secundario para jóvenes y adultos. En lo que era el estacionamiento, pronto sé inaugurará un jardín maternal abierto a la comunidad. Sueñan con armar una Escuela en la que los obreros de las fábricas recuperadas puedan capacitarse en áreas que no les son propias (marketing, ventas, computación) y también con tomar gente cada vez más joven para ir formándola y crear un esquema de producción y trabajo que se sostenga en el futuro.
El mejor rescate que podemos hacer es que el plantel actual está integrado por personas con más de 40 años de antigüedad y jóvenes que se van incorporando a medida que la Empresa se expande; se ha recuperado el rol de "aprendiz", este proceso de retroalimentación es útil a los Mayores quienes pueden transmitir sus conocimientos y a los jóvenes que pueden interiorizar una imagen positiva de la Vejez. Ambas generaciones se necesitan.
"Experiencia Fábrica Bloques" para la construcción (Villa Gesell-Provincia de Buenos Aires-Argentina), con características similares a Maderera, estuvieron más de 10 años con las puertas cerradas y la reactivación se produce a partir de 2004. Aquí también el Adulto Mayor (80 años), tiene como aprendiz a un joven de 28 años (se proyectarán transparencias).
Transitando el camino de Madrid+5, enmarcamos esta Ponencia tomando algunos parámetros del Documento elaborado por el Consejo Económico y Social (UN Nº 5 / 2007/ 7) que consideramos imprescindibles para el progreso del Plan de Acción, entre ellos la Igualdad de Oportunidades, la lucha contra la discriminación por edad, fomentar la plena participación de los protagonistas; en definitiva el respeto por los Derechos Humanos que promuevan la dignidad, para que el lema de la II Asamblea Mundial "Construyendo una Sociedad para Todas las Edades", se convierta en realidad, comprendiendo que mitos y prejuicios sociales siguen internalizados en la Sociedad, mediatizando la visión que la población general tiene sobre sus posibles necesidades, los valores y beneficios que pueden tanto aportar como recibir.
Es un verdadero desafío orientado a eliminar los estereotipos y las etiquetas negativas que marcan a los que envejecen, sobreponiendo sobre ellas lo positivo, insistiendo más en las habilidades que en los desajustes, en la variabilidad más que en la uniformidad.
La discriminación es uno de los más grandes obstáculos para la realización plena de los Derechos Humanos y uno de los factores que genera mayor violencia social. Aprender a reconocerla y superarla es indispensable si queremos construir una sociedad más justa, basada en el respeto a la vida y la dignidad de las personas.
Las políticas sociales responsables deben estar basadas en la defensa de los Derechos Humanos, y prestar especial atención a este sector de la población. Ignorar las demandas y necesidades de los Mayores cercena las posibilidades de las generaciones futuras.
Ya nos alertaba el Informe IDH / 94 (1):
"Creemos colectivamente que nuestro mundo no puede sobrevivir si sigue siendo rico en una cuarta parte y pobre en sus otras tres cuartas partes, democrático en una mitad y autoritario en la otra, con oasis de desarrollo humano rodeados de desiertos de privación humana. Nos comprometemos a adoptar todas las medidas necesarias, en los planos nacional y mundial, a fin de invertir la actual tendencia al aumento de las disparidades dentro de un mismo país y entre distintos países".
"Prometemos asumir un profundo compromiso en pro de una nueva filosofía social y económica que coloque al ser humano en el centro de nuestras preocupaciones y cree vínculos inquebrantables de solidaridad humana".
"Proponemos la creación de una sociedad donde el derecho al alimento sea tan sacrosanto como el derecho a votar, donde el derecho a la educación básica esté tan firmemente consagrado como el derecho a la libertad de prensa y donde el derecho al desarrollo se considere uno de los derechos humanos fundamentales".
Se trata entonces de poner en práctica efectiva los "Principios de las Naciones Unidas a favor de las Personas de Edad" (1991) Independencia; Participación; Cuidados; Autorrealización y Dignidad; para que los Mayores puedan ejercer el Derecho al Trabajo, sin cercenamientos ni discriminación por edad.
Las personas no sólo desean vivir y poder desarrollarse, también anhelan tener conocimientos y una vida digna, la cual no esté permanentemente sujeta a situaciones de pobreza extrema y de preocupaciones constantes en relación con la subsistencia.
Partimos de la convicción que la educación, la salud, la vivienda digna y el trabajo son derechos humanos y sociales inalienables, una herramienta poderosa en la construcción histórica de una sociedad justa e igualitaria. Sostenemos que la edad no debe ser una barrera para: Participar-Enseñar-Aprender-Comunicarse-Trabajar-Elegir- Defender su dignidad- Ser Independiente-Decidir el Domicilio-Desarrollar su vocación.
Ya cerrando nos vamos a referir nuevamente al Informe de la Comisión de Desarrollo Social (45º Período de sesiones; febrero-2007 E/CN. 5/2007/7). "Principales acontecimientos en la esfera del envejecimiento desde la Segunda Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento".
Informe del Secretario General
"El presente informe, que se ha elaborado en cumplimiento de la resolución 44/1 de la Comisión de Desarrollo Social, trata de algunos de los principales acontecimientos regionales y mundiales que se han producido en la esfera del envejecimiento desde la Segunda Asamblea Mundial sobre el Envejecimiento, celebrada en 2002. Tomando en consideración la evolución de la estructura de edad de la población, en él se estudian una serie de cuestiones socioeconómicas, por ejemplo la sostenibilidad de los regímenes de protección social, la participación de los trabajadores de más edad en el mercado laboral y diversos planteamientos para reajustar los servicios de atención sanitaria y social, así como otras cuestiones que guardan relación con la potenciación del papel de las personas de edad, como la defensa de sus derechos, el favorecimiento de su participación en la sociedad y el fomento de una consideración social favorable y equilibrada del envejecimiento".
Hace a la convocatoria de este Seminario y remarcamos el punto 44 donde señala:
"A falta de unos instrumentos de derechos humanos en materia de envejecimiento convenidos internacionalmente, por ejemplo una convención o un texto equivalente que sea jurídicamente vinculante, la defensa de los derechos humanos de las personas de edad ha ido ganando terreno primordialmente en el ámbito nacional, gracias a la promulgación de unos reglamentos y normas especiales de protección de esos derechos y a la elaboración de programas de promoción de intereses, capacitación y educación".
Compartimos con este Honorable Auditorio que solamente se pueden considerar instrumentos de efectivo cumplimiento Nacional, cuando sean derivados de un compromiso Internacional asumido formalmente en el seno de Naciones Unidas y convocamos a los aquí presentes para que el Instrumento Jurídicamente Vinculante en Defensa de los Derechos de los Adultos Mayores se haga realidad, proponiéndonos trabajar arduamente en nuestros respectivos Países y a la vez en forma conjunta para llegar a Madrid +5 con Propuestas concretas.
Muchas gracias
BIBLIOGRAFÍA
1) Informe sobre Desarrollo Humano PNUD-1994
OPS-OMS-OIT Diversos Documentos