La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH) denunció al estado Argentino ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por violaciones a la Convención Americana.
Tras numerosos reclamos administrativos desde 2007 hasta la fecha, la APDH agotó la vía judicial interna reclamando el cese de la práctica policial que se conoce comúnmente como “detenciones por portación de rostro” o “delito de aspecto” en la Provincia de Mendoza.
La APDH denunció la práctica policial de detenciones masivas y arbitrarias, no vinculadas a delitos, estimadas entre 201.932 y 469.152 por año, sin contralor judicial previo ni posterior. Estas detenciones con traslado a sede policialse pretenden justificar por las potestades policiales de“averiguación de identidad y antecedentes”, y frecuentemente están asociadas con tratos crueles y degradantes.
Denuncia la APDH que la casi totalidad de los aprehendidos son personas provenientes de barrios periféricos urbano o semiurbano marginal, lo que evidencia una clara política discriminatoria, al tratar de mantener a estas personas alejadas del centro de la ciudad, creando una suerte de ghettos urbanos.
Esta política resulta también evidenciada claramente al completar el motivo de la detención, consignando razones como “no justifica su presencia en el lugar”, cuando ese lugar es la vía pública.
Estas prácticas policiales se verifican en Mendoza (y otras provincias) desde hace varios años y bajo gobiernos de distinto signo partidario. Conforme a la APDH,el actuar policial y la indiferencia judicial constituyen un incumplimiento del estado argentino respecto al compromiso asumido en la Convención Americana sobre Derechos Humanos en el Artículo 5 (Derecho a la Integridad Personal), el Artículo 7(Derecho a la Libertad Personal) y el Artículo 8 (Garantías Judiciales).
Buenos Aires, 15 de abril de 2016