La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos se solidariza con la comunidad de Jáchal y el pueblo sanjuanino ante el desastre ecológico producido en la cuenca del río Jáchal por la empresa Barrik Gold tras el nuevo derrame de agua cianurada en la mina Veladero. Hace poco más de un año la empresa dejó una compuerta abierta que contaminó el río Potrerillos . Una semana atrás el desacople de una cañería por el impacto de un trozo de hielo desprendido del glaciar, produjo un nuevo derrame y el envenenamiento de las aguas de la cuenca . Esto sucede en zona de periglaciar donde la actividad minera está prohibida por la Ley de Glaciares en vigencia.
La justicia federal reactivó las causas judiciales que investigan las responsabilidades que caben a la empresa por posible envenenamiento y delitos de comisión ambiental y comenzó a investigar las áreas de Ambiente y Minería nacionales por posible incumplimiento de sus deberes en resguardo del ambiente y la población.
Los miles de litros de cianuro derramados impiden el acceso de agua a los pobladores vecinos a la mina y los impulsa a demandar al Estado que declare el desastre ambiental, inicie una causa contra la Barrick, obligue a la reparación de los daños causados y decida su expulsión del país.
Las autoridades nacionales y provinciales pretenden minimizar esta situación que se puede caracterizar como crimen ecológico afectando el derecho a la vida de varias pequeñas comunidades sanjuaninas al contaminar glaciares y cuencas hídricas.
Como movimiento de Derechos Humanos nos hacemos eco de las demandas de justicia de la población afectada y exigimos de las autoridades nacionales el cumplimiento de las garantías constitucionales para las personas y comunidades lesionadas y la revisión integral de las políticas mineras nacionales y provinciales en vigor, que favorecen la contaminación, la destrucción del territorio y el saqueo de las riquezas por parte de las mega empresas extranjeras.
19/09/2016