La APDH manifiesta su profundo pesar
ante el fallecimiento de la Dra. Carmen Argibay,
su desaparición significa una gran perdida para La República.
ante el fallecimiento de la Dra. Carmen Argibay,
su desaparición significa una gran perdida para La República.
Por su eficiente desempeño como Jueza fue secuestrada pocos días después del golpe militar de 1976, permaneciendo largos meses prisionera en la Cárcel de Devoto, al regreso de la democracia asumió nuevamente su cargo. Luchadora incansable por los derechos de la mujer, creó la Asociación de Mujeres Juezas en Argentina y emprendió la tarea de capacitar en género a la justicia, en todo el país. Como miembro fundador de La Asociación Internacional de Juezas presidió esa entidad del año 1998 al 2000. Formó parte del Tribunal Internacional que juzgó y condenó al ejército japonés por haber sometido a esclavitud sexual a mujeres de distintos países. En el 2001 fue designada Jueza ad litem en el Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia.
La primera mujer nominada en democracia, para integrar la Corte Suprema de la Nación fue Carmen Argibay, y ella fue la que creó la Oficina de la Mujer en la Corte Suprema. Su profundo sentido republicano y sus valores éticos rigieron toda su vida, valores que expresó al decir que un buen Juez debe saludar y agradecer su designación a los miembros de los otros Poderes, luego no volver a contactarlos nunca más.
La APDH ha tenido el orgullo de haber contado con su colaboración en varias oportunidades. En el año 2004 le fue otorgado el Premio Dignidad, premio que la institución entrega a mujeres destacadas por su lucha en defensa de los derechos humanos de las mujeres. En el 2005 participó de la publicación “El Poder de las Mujeres”, elaborada por la Secretaría de la Mujer de la APDH.
Se trascriben dos ideas suyas vertidas en dicha publicación:
“El Poder es algo difícil de definir, se cree que el poder es solamente tener la oportunidad de mandar, creo que no es así, hay que tener noción de los límites, el poder no permite hacer cualquier cosa.”
“Los jueces deben animarse a ser independientes y a resistir las presiones internas y externas para fallar con independencia de los poderes de turno.”
Mujer excepcional, brillante, irremplazable, su ejemplo será guía para las nuevas generaciones.
Mesa Directiva APDH
Ciudad de Buenos Aires, 12 de mayo de 2014