Los casi 100 asistentes al Encuentro Nacional de Militantes de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), reunidos en Chapadmalal del 1° al 3° de mayo del corriente año, aprobaron por unanimidad solicitar el relevo como Comandante en Jefe del Ejército del General César Milani por considerar que su permanencia en el cargo es una acción de impunidad y agravio a la lucha por la Verdad, la Memoria y la Justicia.
Su designación al frente del ejército se produjo en medio de la oposición de la mayoría de los Organismos de Derechos Humanos, pese a lo cual el gobierno nacional sostuvo su posición sobre la base del principio de inocencia, desconociendo y poniendo en tela de juicio los dichos de las víctimas de Milani, quien ya en 1984 fue denunciado en la Comisión de Derechos Humanos de La Rioja, en el marco de la CONADEP. Así, vuelve a victimizarse a los sobrevivientes del genocidio y sus familiares.
Su permanencia en el cargo favorece las acciones para impedir el avance de las investigaciones judiciales en las causas por delitos de lesa humanidad por la desaparición del conscripto Alberto Ledo, el secuestro y torturas de Ramón Olivera y su padre, y su intervención activa en el Operativo Independencia y como personal de Inteligencia en el Batallón de Inteligencia 601.
Somos conscientes de que las poderosas empresas de comunicación han multiplicado su ofensiva en defensa de la impunidad de los coautores judiciales y empresariales de la dictadura cívico-militar. Así han operado en las causas contra Blaquier, Massot, Papel Prensa y Hooft, entre tantas. En particular, La Nación en las causas Jaime Lamond Smart y Roberto y Alberto Rodríguez Varela, y silenciando los históricos juicios de lesa humanidad y la voz de las víctimas. Por ello, la propuesta de estas empresas multinacionales, que otrora le dieran la bienvenida al Estado Terrorista, de solicitar el enjuiciamiento a Milani, será bienvenida cuando exhorten, con igual fuerza, a la continuidad y profundización de los juicios de lesa humanidad.
Porque somos ajenos a oportunismos políticos creemos que tener al General César MiIlani como Comandante en Jefe del Ejército es un paso a la impunidad y su permanencia en el cargo es un agravio a toda la sociedad. Milani debe ser separado del cargo y rápidamente enjuiciado.
Las víctimas de los crímenes de la dictadura y toda la sociedad tienen el derecho a conocer la verdad de lo sucedido y al justo castigo de los responsables.
Mesa Directiva
Ciudad de Buenos Aires, 26 de mayo de 2015.